¿Quién te conoce?

Si te leen, tal vez pueden saber más de ti que aquellos que creen conocerte. Unos miran con los ojos, escuchan tu voz, pero el ser que te habita no puede mostrarse completamente y generalmente la voz está limitada por las conveniencias sociales, no puede permitirse herir, no puede hablar de lo que quiere, porque está lindada por quien escucha. Toda conversación necesita que los actuantes estén interesados en el mismo tema tratado. Mientras se escribe, se es más libre y es más elaborado el pensamiento. No se impone nada, pero tampoco está vetado ningún tema. La escritura permite que el ser, habitante de un cuerpo, viva a través de las letras, sueñe con la realización de sus ideales y responda a cuestiones surgidas en el diario vivir. ¿Quién te conoce realmente?, muchas veces, algunas reacciones nos hace parecer que somos desconocidos inclusive para nosotros mismos, si no existe la seguridad de conocernos, ¿quien realmente puede llegar a saber quienes somos y como reaccionamos ante la vida?, probablemente nadie y es que si además le adicionamos los cambios que vamos dando en el día a día, puede suceder, que el ser humano de ayer no sea el mismo de hoy. Ragde 47