En la ciudad de las sardinas
enlatadas, en la ciudad donde las personas se someten a ciertas dificultades de
desplazamiento digno, hoy escribo, hoy voy a echarle flores ya que me presentó
la cara del arte, de los centros comerciales, de las masas en diversión múltiple
y compartida.
Hoy por primera vez entre a
cine, a mis 32 años, a pesar de haber visto muchas películas y de gustarme el
arte mágico tras una cámara, no me había sido posible encontrarme directamente
con una sala de cine, hoy sucedió el mágico momento, pase directamente al 3D,
mirando a los Croods, muy buena imagen, excelentes paisajes, y sobre todo
maravillosos el juego visual con la tercera dimensión.
En la ciudad de las
distancias, un cinemark estaba tan cerca y tan lejos, quien no sabe es igual
que quien no ve reza un dicho popular, y estaba convencido que para poder
visitar una sala de cine, me tendría que desplazar hacia el centro, la realidad
es que me olvidaba que en la gran ciudad, existen miniciudades, donde los
hombres, mujeres y niños convergen construyendo cercanía.
La gran ciudad me presenta
una cara positiva, no todo podía ser malo, ahora el descanso tiene mejores “proyecciones”
para el futuro…
Ragde 47
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.