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Alguien me dijo:

"Todo lo que pasa en la vida tiene una razón de ser, Dios no deja nada al azar"

...así mismo dile a los que están en la película contigo, que no todo fue planeado así, pero la idea general está plasmada en cada experiencia vivida, que el Dios del amor, que controla su creación no sabe del error, no puede equivocarse porque dejaría de ser quien es...

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martes, 10 de septiembre de 2013

Colombia, la alocada del barrio



Ella es joven aún, está en etapa adolescente, su inmadurez la ha llevado a venderse de vez en cuando al galán del norte. Él es un tipo que le encanta jugar con el vicio, pero gracias a que anda en la cima, nadie le dice nada.

Su arrebatado actuar, la lleva a pasar de la euforia en fiestas, carnavales y reinados, a estados irascibles llenos de rebeldía, confrontando cuanta regla establecida quiere limitarla.

Ella es bipolar, alocada, una rebelde sin causa y con causa, justa o injusta. Está antecedida de un acné que marcó su rostro, que le dejó profundas cicatrices, por ello oculta su cara. Entre las calles se le ve embriagarse varias veces al año, tratando de zanjar sus problemas, que se agrandan con el despertar diario.

Luego de noches lujuriosas con el hombre fuerte del norte, las cuales son prohibidas por los cánones de la ética, llena de la corrupta mano que la hastía de suciedad, ennegrece su vestir, derrumba su caminar, torpe, cae en el sumiso acto de la autoflagelación, donde esclava de su ruina, reniega de la vida.

Tras noches de desasosiego, por esos azares de la vida, vuelve y comienza su círculo vicioso de los cambios repentinos de estado de ánimo, llegan nuevamente las fiestas, se celebran los goles y se sueña.

Amanece, las ojeras no se sabe si son de trasnocho o de no poder dormir tranquila, ella saca su minifalda, se siente divina y por ello sale a invitar a sus vecinos a que prueben a través de ella la gloria, con un escote en su espalda, con un aroma a café, con unas curvas que turban el ojo, ella, la joven aún, es el encanto de la creación.

Porque de su experiencia, aparentemente ruinosa, la vida se construye con más perfección, ella es la orientación para el hombre sin guía, la dama que en su madurez más sensata, va a caminar erguida y orgullosa de saber a través de la práctica, que la locura tiene cura, pero el paso del tiempo más que construir arrugas, va a traer sensaciones, seguridades y un amor, que ya entrada en gastos, va a derramar como si fuese a morir en el mañana…



Edgar        

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